Consiste en la remodelación del contorno y reducción de volúmenes mediante la aplicación de energía láser y la eliminación del exceso de tejido adiposo usando una fina cánula.
Los resultados son permanentes pues el número de células de grasa en nuestro cuerpo no varía después de la adolescencia. Por lo tanto, una vez que la grasa es extraída de estas regiones no se acumula nuevamente.

La liposucción no es un tratamiento para la obesidad, sin embargo, la eliminación de la grasa no deseada no solo ofrece ventaja cosmética, sino también ayudar en el tratamiento de la obesidad y la diabetes de tipo 2, ya que el metabolismo de los hidratos de carbono se regula con la reducción de las células de grasa.